Propiedades y beneficios de las Semillas de Alholva (fenogreco)
El fenogreco (Trigonella foenum-graecum), un miembro menos popular de la familia de los guisantes y las judías, se ha domesticado con fines culinarios y medicinales. La planta se utiliza como cultivo ganadero, mientras que sus semillas se recolectan para el consumo humano y son muy apreciadas por su alto valor nutritivo y sus efectos beneficiosos para la salud del aparato digestivo, respiratorio, circulatorio e inmunitario.
Las semillas de alholva constituyen un excelente tónico, ideal para revertir las carencias nutricionales y recuperar la vitalidad. Combaten la fatiga y reducen la niebla cerebral.
Las semillas de alholva son una rica fuente de minerales como cobre, hierro, magnesio, manganeso y zinc. Se utilizan para tratar trastornos digestivos leves y mejorar la lactancia en madres primerizas.
Las decocciones de semillas de alholva sirven para mejorar la actividad hepática, estimular el apetito, aflojar las heces y aliviar la mucosa estomacal.
Las infusiones ayudan a tratar los problemas de sinusitis, la tos y a mantener bajo control los niveles de azúcar y colesterol en sangre. Además, se cree que su consumo regular ayuda a controlar y tratar la anemia causada por la falta de hierro.
✪ Propiedades y Beneficios de las semillas de alholva

¿Qué aspecto tiene el fenogreco?
La planta del fenogreco se parece mucho al trébol de tres hojas. Sin embargo, sus semillas tienen un aspecto más peculiar, en el sentido de que tienen forma de maíz y un color entre marrón y ámbar.
Las semillas de fenogreco son bastante duras, así que no se preocupe si a su molinillo de café le resulta difícil molerlas.
¿A qué saben las semillas de alholva?
Las semillas frescas de alholva tienen un sabor amargo pero agradable y un fuerte aroma a jarabe de arce. Sí, ¡a jarabe de arce! Las semillas de alholva tostadas tienen un sabor a nuez y un gusto más amargo. Puedes encontrar fenogreco en polvo o en bolsitas para infusiones en las tiendas naturistas.
El fenogreco fresco y seco, así como las semillas de fenogreco, están disponibles en muchos mercados de Oriente Medio, especialmente en los mercados indios.
Las hojas y brotes de fenogreco también son comestibles y van bien en ensaladas, guisos u otros platos tradicionales como el pan plano indio, sabzi, mientras que las semillas de fenogreco van bien en chutney, curry, dosa (una especie de crepe india fermentada) y más.
Beneficios y usos de las semillas de alholva
Las semillas de alholva son una rica fuente de minerales, vitaminas, fibra y compuestos importantes con grandes beneficios para la salud, como saponinas, hemicelulosa, mucílagos, taninos y pectina.
Las semillas contienen un 65% de fibra, por lo que ayudan a reducir la tasa de absorción de glucosa a nivel intestinal. 100 g de semillas tienen 24,6 g de fibra alimentaria, mientras que una cucharada sopera tiene 2,7 g de fibra.
Esto estabiliza los niveles de azúcar en la sangre y contribuye a una mejor gestión de la diabetes de tipo 2, además de prevenir las fluctuaciones energéticas, garantizando niveles de energía constantes entre comidas.
Las saponinas del fenogreco, junto con la fibra y la 4-hidroxiisoleucina (un aminoácido), son responsables de reducir los niveles de glucosa y colesterol en sangre.
Por este motivo, se recomienda el consumo de las semillas, ya que ayudan a mantener bajos los niveles de azúcar y colesterol en sangre, siendo un alimento ideal para cualquier persona que padezca diabetes o enfermedades cardiovasculares, especialmente aterosclerosis.
Además, la fibra y la pectina (un polisacárido) que se encuentran en las semillas de fenogreco aumentan el volumen de las heces y ayudan así a aliviar el estreñimiento de forma natural.
Sin embargo, cuando se consumen alimentos ricos en fibra hay que recordar beber también mucha agua para que la fibra tenga líquidos que absorber y añada volumen a las heces.
El mucílago presente en las semillas protege la mucosa del estómago contra los irritantes, reduce la inflamación y permite su curación.
Hace lo mismo con otras mucosas de la nariz, la garganta y los pulmones, de ahí las propiedades antitusígenas y expectorantes del fenogreco. Tradicionalmente, las infusiones o decocciones de alholva se utilizaban como demulcente natural para aliviar el dolor de garganta, ayudar a licuar y expulsar las flemas y aliviar la tos.
Otros fitoquímicos del fenogreco son la colina, la trigonelina, la diosgenina, la yamogenina, la tigogenina y la neotigogenina. La colina favorece el desarrollo normal del cerebro del feto, por lo que es un nutriente clave durante el embarazo.
Otro beneficio muy importante para la salud del consumo de hojas y semillas de fenogreco es el aumento del flujo de leche en las madres primerizas. El fenogreco y otros remedios herbales se recomiendan a menudo a las madres lactantes para aumentar el flujo de leche antes que los medicamentos recetados, porque rara vez presentan efectos secundarios.
Aunque el fenogreco puede tomarse en dosis que oscilan entre 5 y 8 gramos/día (dependiendo de lo que recomiende el médico), su consumo suele ser seguro.
Información nutricional sobre las semillas de alholva
Si echas un vistazo verás que el fenogreco es una gran fuente de minerales, lo que lo convierte en un excelente tónico. El alto contenido en hierro, cobre, manganeso, magnesio, fósforo, zinc, potasio y calcio de las semillas favorece la recuperación y ayuda a vigorizar el organismo.
El hierro (419%) ayuda a crear nuevos glóbulos rojos, combate la debilidad muscular y los bajos niveles de energía, síntomas ambos de la anemia.
El cobre (123%) previene los signos de envejecimiento prematuro, como la decoloración del iris o las canas. El magnesio (48%) garantiza la salud de los músculos, incluido el corazón, y aumenta la absorción de calcio en los huesos. El manganeso (53%) tiene una potente actividad antioxidante y protege contra el estrés oxidativo.
Efectos secundarios de las semillas de alholva
Si consume demasiado fenogreco, puede experimentar algunos efectos secundarios, como los siguientes signos y síntomas: náuseas, gases, hinchazón y otras molestias digestivas. Además, sería mejor limitar su consumo si padece asma o alergias, ya que demasiado fenogreco puede empeorar los síntomas de la alergia.
Comer semillas de fenogreco o beber té de fenogreco probablemente hará que la orina, a veces la leche, huela a jarabe de arce o afloje las heces.
Sin embargo, estos síntomas no son preocupantes porque desaparecerán en cuanto interrumpa su consumo.
Conclusión
En general, las semillas (hojas y brotes) de fenogreco son un excelente laxante natural, digestivo y remedio contra la tos, la sinusitis y la bronquitis. Mantienen bajos los niveles de azúcar, colesterol y triglicéridos en sangre, por lo que ayudan a controlar la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
El fenogreco es excelente para las madres primerizas porque aumenta el flujo de leche. Sin embargo, debe evitarse al final del embarazo porque puede provocar un parto prematuro.
Si se está tomando medicación anticoagulante, es mejor evitar el fenogreco porque puede provocar hemorragias.