Propiedades y beneficios del Azafrán
Esta especia amante del sol es la progenie domesticada del azafrán silvestre y muy apreciada como especia y como hierba. El azafrán es en realidad el estigma de la flor del azafrán de lavanda, conocida científicamente como Crocus sativus. Esta especia, de color rojo brillante y parecido a la seda, debe su sabor único a innumerables aceites volátiles y su color brillante a los potentes alfa y betacarotenos, lo que la convierte en un alimento excelente para una buena visión y salud ocular.
Además, el azafrán tiene un impresionante contenido en vitaminas y minerales, con grandes beneficios para la salud del corazón, los músculos y los huesos.
Es una fuente extremadamente rica en manganeso, hierro, magnesio, cobre y fósforo, potasio, vitaminas C y A y vitaminas del grupo B, nutrientes con beneficios óseos, musculares, oculares y cardiovasculares, así como impresionantes propiedades antibacterianas y antioxidantes. El color único de la especia es indicativo de la presencia de un alto contenido de zeaxantina, un carotenoide conocido por favorecer la salud de la retina.
✪ Beneficios del azafrán
¿Cómo se fabrica el azafrán?
La especia del azafrán se obtiene de la recolección de los extremos rojos o anaranjados de los pistilos de la flor del azafrán, también conocidos como estigmas. El azafrán culinario domesticado también se denomina azafrán crocus. Es a la vez una especia y una hierba con fuertes propiedades medicinales. Aunque contiene tanto alfa como betacaroteno, dos potentes antioxidantes naturales y agentes colorantes, el azafrán debe en realidad la mayor parte de su brillante pigmento rojo a un carotenoide especial llamado alfa-crocina. Según varios estudios, las crocinas del azafrán protegen las células nerviosas de los daños causados por los radicales libres y favorecen la regeneración de los nervios.
Sustancias químicas del azafrán
El sabor característico del azafrán procede de una combinación de aceites volátiles, entre los que se encuentran: safranal, cineol, pineno, borneol, geraniol, limoneno, p-cimeno, linalol y terpinen-4-ol. La mayoría de los aceites volátiles confieren al azafrán grandes propiedades antiinflamatorias y calmantes, además de representar la fuente del sabor y el perfil aromático único de la especia. El safranal es en realidad un derivado de la zeaxantina, un carotenoide con potentes propiedades antioxidantes. El alfa-caroteno, el beta-caroteno, el licopeno y el safranal, todos ellos componentes carotenoides principales del azafrán, son responsables de la impresionante actividad antiséptica, calmante de la digestión, antiinflamatoria y antioxidante de la especia.
Datos nutricionales y efectos sobre la salud del azafrán
El azafrán y el embarazo.
Las prácticas de la medicina tradicional fomentan el consumo de azafrán incluso en las mujeres embarazadas. Aunque se pueden añadir una o dos hebras de azafrán a un vaso de leche de vez en cuando, es mejor consumir toda la variedad de especias o hierbas con moderación cuando se está embarazada. Las especias y hierbas, incluso las que calman el estómago, pueden favorecer las contracciones uterinas, lo que puede provocar un aborto a las embarazadas. Por este motivo, se aconseja a las mujeres embarazadas que mantengan un bajo consumo de especias y hierbas. Pero lo más importante es que hablen con un médico antes de introducir nuevos alimentos en su dieta, especialmente si dichos alimentos son hierbas o especias culinarias.
Otros efectos y beneficios del azafrán para la salud.
Como se ha mencionado anteriormente, el azafrán es una rica fuente de carotenoides, como sugiere su brillante e intenso pigmento rojo-anaranjado. La zeaxantina, un carotenoide antioxidante presente en el azafrán, contribuye en gran medida a la salud ocular. La zeaxantina es un antioxidante de origen vegetal y un componente físico de la mácula lútea, parte central de la retina humana.
Una dieta rica en azafrán, pimentón, pimientos, maíz y otros alimentos ricos en zeaxantina es fundamental para una mácula lútea sana y desempeña un papel definitivo en la prevención de la degradación de la visión en forma de degeneración macular (pérdida de la visión central). La zeaxantina se acumula básicamente en el centro de la retina, donde forma un punto de filtrado de los radicales libres de la luz azul.
Datos nutricionales del azafrán
El azafrán tiene un contenido increíblemente alto de manganeso (1235% de la IDR, ingesta diaria recomendada para 100 g de la especia). El manganeso es un mineral antioxidante que protege a las células del daño causado por los infames radicales libres. Al impedir que el daño celular se acumule y altere las estructuras básicas del ADN, los antioxidantes protegen contra enfermedades crónicas como el cáncer o las enfermedades cardiovasculares. La vitamina C actúa de forma similar.
El azafrán aporta el 135% de la IDR de vitamina C, un potente antioxidante, antibacteriano y antiinflamatorio. Tener grandes cantidades de vitamina C en su sistema previene eficazmente las arrugas, reduce la frecuencia, la duración y la gravedad de los resfriados, así como la inflamación, una condición asociada a todas las formas de enfermedad crónica.
El azafrán también aporta cantidades significativas de vitaminas del grupo B. El folato (23%), la piridoxina (77%) y la riboflavina (20%) aumentan la eficacia con la que nuestro cuerpo produce energía a partir de los alimentos y favorecen la salud muscular y nerviosa. Además, el azafrán tiene una acción beneficiosa para la salud del corazón. Con 1724 mg de potasio, que representan el 37% de la IDR, el azafrán ayuda a reducir la presión arterial alta y regula los fluidos corporales.
Conviene saber: durante y después de los angustiosos episodios de diarrea, es mejor suministrar al cuerpo potasio, magnesio y algo de sodio. Se trata de minerales y electrolitos dietéticos y ayudan al cuerpo a recuperarse tras una deshidratación grave causada por la diarrea o los vómitos. Ayudan a restablecer el equilibrio de los líquidos y la función cardiovascular y muscular normal. Más información sobre qué comer cuando se tiene diarrea.
El azafrán también favorece unos huesos fuertes y sanos y un buen tono muscular gracias a su alto contenido en magnesio (66%). El magnesio aumenta la absorción de calcio en los huesos (no en otros lugares) y asegura el buen funcionamiento de músculos como el corazón. Con un 139% de la IDR de hierro, el azafrán es una excelente especia para quienes padecen anemia por falta de hierro. El selenio y el zinc presentes en el azafrán favorecen la salud de la glándula tiroidea y favorecen la inmunidad. Para obtener más información sobre las vitaminas y los minerales, vaya a la página de vitaminas y minerales en el menú superior.
Conclusión
Aunque está destinado a ser consumido en cantidades mínimas, como condimento para los alimentos, el azafrán sigue siendo una opción saludable que merece la pena incluir en nuestra dieta. No obstante, recuerde comprobar siempre los estándares de calidad y la autenticidad al comprar la especia. No todos los productos etiquetados con azafrán son realmente azafrán, sino especias parecidas que pretenden imitar el color y, hasta cierto punto, el sabor de la especia real. Además, aunque el azafrán es fuente de varias propiedades maravillosas y beneficios para la salud, hay que saber que, en las cantidades en que debe consumirse, su aporte nutricional y sus efectos sobre la salud son mínimos.