Propiedades y beneficios de la Patata

A pesar de su buen perfil nutricional y su excepcional versatilidad culinaria, las patatas (Solanum tuberosum) son fácilmente mal juzgadas y etiquetadas como el alimento de los pobres. Por esta razón, muchas personas suelen evitar comerlas por miedo a ser juzgadas como de mal gusto y poco dinero.

En realidad, las patatas son extremadamente beneficiosas para nuestra salud. Son una buena fuente de fibra dietética, almidón, vitaminas y minerales, sobre todo vitamina C y potasio.

Además, son una verdura alcalina, lo que significa que ayudan a preservar un delicado equilibrio en nuestro organismo que contribuye a mejorar la salud. El consumo regular de patatas puede ayudar a reducir la hipertensión y regular el azúcar en sangre.

Esta hortaliza es también una buena fuente de vitaminas del grupo B que contribuyen a una buena digestión y favorecen la actividad del cerebro y el sistema nervioso.

Las patatas son incluso excelentes para las náuseas matutinas y problemas de la piel como el acné, debido a su buen contenido en piridoxina.

✪ Propiedades y Beneficios de la Patata

Propiedades y beneficios de la Patata

Sobre las patatas

Al igual que los cacahuetes, las patatas crecen bajo tierra, lo que las convierte en tubérculos. Son básicamente una hortaliza de almacenamiento que reúne nutrientes esenciales destinados a garantizar la supervivencia de la planta durante el invierno.

Impresionante, ¿verdad? Y nosotros sólo tenemos que desenterrarlas y recoger las ricas reservas de nutrientes que contienen. Las patatas son bastante fáciles de identificar.

¿Qué aspecto tienen las patatas?

Probablemente no haya persona en este mundo que no sepa qué aspecto tiene una patata. Redondas, ovaladas, ligeramente rectangulares o con formas increíblemente extrañas, varían enormemente en tamaño (piense en tomates cherry hasta enormes membrillos) y en color, textura e incluso sabor.

El color de la piel varía entre el amarillo apagado, el rosa, el marrón claro, el rojo, el morado claro y oscuro y el marrón oscuro. Las variedades comunes de piel amarilla tienen una pulpa clara y cremosa, mientras que las más oscuras la tienen más oscura.

Dependiendo de la variedad, las patatas pueden tener una textura dura o blanda tras la cocción.

¿A qué saben las patatas?

Las patatas tienen un sabor bastante insípido en general, pero lo compensan con su textura cremosa. Su sabor es más o menos almidonado, dependiendo de la variedad y de cómo se cocinen, pero también tienen ligeras notas de sabor, a veces dulces y a veces ligeramente a nuez, según la variedad.

Lo bueno de su sabor es que complementan una gran variedad de platos con distintos sabores y texturas, actuando como guarnición perfecta para acompañar comidas más sabrosas, abundantes y muy condimentadas.

¿Cuáles son los beneficios de las patatas?

1) Fuente moderada de calorías

100 g de patatas nos aportan sólo 70 kilocalorías (kcal) y menos del 0,1% de grasa. A pesar de que muchos las condenan, las patatas pueden ayudar a adelgazar, siempre que no se frían.

A menudo me gusta comer 1-2 patatas cocidas medianas con queso fresco de vaca o de cabra (queso nuevo que no esté maduro) y perejil fresco o cortadas en trozos y hechas ensalada junto con 1-2 huevos cocidos, aceitunas y puerro. Sencillo, nutritivo y respetuoso con la cintura.

2) Alimentos cardiosaludables

Las patatas contienen buenas cantidades de fibra dietética (2,5 g/100 g), nada de grasa, nada de colesterol y, lo que es más importante, potasio (10% de la CDR). La fibra impide que el exceso de grasa de los alimentos que ingerimos se absorba a nivel intestinal y pase después al torrente sanguíneo, por lo que contribuye indirectamente a reducir los niveles de colesterol en sangre.

Al regular los fluidos corporales, el potasio consigue reducir la hipertensión arterial y mantener la salud cardiovascular.

3) Bueno para la salud del colon, alivia el estreñimiento

Las patatas son más conocidas por su alto contenido en almidón. El almidón es un hidrato de carbono considerado resistente a las enzimas digestivas. Como resultado, pasa sin modificar a través del tracto digestivo, de forma similar a la fibra. Esto ayuda a añadir volumen a las heces, facilitando evacuaciones más frecuentes y aliviando el estreñimiento.

Además, los estudios sugieren que limitar el tiempo que nuestro colon está expuesto a las toxinas de los residuos (como consecuencia del estreñimiento) puede tener efectos beneficiosos a largo plazo sobre la salud del colon. Hervir las patatas aumenta significativamente su contenido en almidón.

4) Ayuda a regular los niveles de azúcar en sangre

La buena cantidad de almidón que contienen las patatas desempeña un papel esencial en la regulación de los niveles de glucosa en sangre después de las comidas y evita los picos de azúcar en sangre que provocan fluctuaciones en los niveles de energía y, en última instancia, fatiga.

Sin embargo, la ingesta es crucial y las patatas sólo deben consumirse en cantidades razonables. Si eres diabético, acompaña las patatas con una fuente de proteínas, como huevos duros, y quizá un poco de mayonesa (también aceitunas negras en salmuera y cebollas verdes) para evitar picos de azúcar en sangre.

5) Buena fuente de vitaminas del grupo B y otros nutrientes esenciales

Las patatas contienen vitaminas B1, B2, B3, B5 y B6, así como cantidades pequeñas o moderadas de potasio, hierro, fósforo, manganeso, magnesio y zinc.

Las vitaminas del grupo B contribuyen a la síntesis de hidratos de carbono, favorecen la salud de las células nerviosas, el desarrollo cognitivo, la digestión y reducen los niveles de inflamación.

El fósforo y el magnesio son excelentes para la salud ósea, mientras que el manganeso contribuye a la producción de hormonas tiroideas, proporciona protección antioxidante y mejora la fertilidad.

La piridoxina (vitamina B6) también puede ayudar con las náuseas matutinas.

6) Buena fuente de vitamina C

Las patatas aportan el 20% de la CDR de vitamina C, un potente agente antioxidante, antimicrobiano y antiinflamatorio. La vitamina C refuerza la inmunidad, reduce la inflamación y favorece la producción de colágeno, retrasando la aparición de arrugas.

Curiosamente, las investigaciones han revelado que la piel de la patata contiene incluso más vitamina C que la pulpa.

Sin embargo, la cocción de las patatas durante largos periodos de tiempo puede hacer que pierdan la mayor parte de su contenido en vitamina C.

7) Presenta actividad antioxidante

Sí, la humilde patata contiene antioxidantes -propios que cazan los radicales libres y los destruyen antes de que puedan dañar las células sanas y provocar su mutación en cancerosas.

Las patatas contienen polifenoles como el ácido clorogénico (que también influye positivamente en los niveles de glucosa en sangre y previene los daños en la retina), el ácido neoclorogénico, así como carotenoides (sobre todo en las variedades de piel roja) y antocianinas (en las variedades moradas).

Además, se ha demostrado que las patatas de piel roja tienen un mayor contenido en vitamina A y zeaxantina, un antioxidante necesario para la salud de la retina y una buena visión.

La zeaxantina se acumula físicamente en la retina, donde actúa como un escudo, absorbiendo la radiación de la luz y evitando que dañe nuestra vista.

Ideas de recetas con patatas

Mis dos recetas favoritas son el puré de patatas y el guiso de patatas y pimientos. Me gusta que el puré de patatas sea suave y espeso, y que esté muy bien triturado. Suelo añadir una pizca de sal, una cucharada de aceite de girasol prensado en frío o de mantequilla y una generosa ración de leche de vaca caliente.

Y el guiso de patatas tiene un sabor absolutamente increíble: se cortan las patatas en trozos grandes y se hierven junto con pimientos rojos, amarillos y verdes y una cebolla frita, se sazona con una pizca de sal, pimienta, un poco de aceite vegetal y se remata el plato con mucho perejil fresco.

Me suele gustar que las verduras tengan un poco de textura, así que añado los pimientos más tarde y no cocino las verduras hasta que estén blandas.

Pero, ¿por qué comer patatas cuando hay tanta variedad de verduras más nutritivas y sabrosas entre las que elegir? Las patatas no sólo son fáciles de cocinar y cultivar, baratas y versátiles, sino que también son bastante sanas. No digo que debas comerlas todos los días, pero recuerda que la variedad en la dieta hace maravillas por tu salud. Vea a continuación mis 7 razones por las que las patatas son buenas para usted.

Conclusión

En general, las patatas son sanas y, por tanto, merece la pena incluirlas en nuestra dieta. No obstante, evite siempre comprar y comer patatas verdes. Las manchas verdes en la piel y la pulpa de la patata indican la presencia de glicoalcaloides tóxicos como la solanina y la alfa-chaconina.

Los glicoalcaloides aparecen de forma natural en las partes de la patata expuestas a la luz solar (tallos, hojas y flores) y, en menor medida, en los tubérculos que normalmente crecen bajo tierra.

Dejar las patatas a la luz directa del sol, en el balcón por ejemplo, hace que la clorofila se acumule en las zonas llenas de glicoalcaloides, lo que indica que esas partes deben desecharse (aunque esto no siempre ocurre).

Comer patatas verdes puede causar molestias gastrointestinales con síntomas como diarrea, náuseas, vómitos, calambres abdominales y malestar. Algunas personas son más sensibles a los efectos de estos compuestos de la verdura que otras.

Aun así, suprimir las partes verdes podría ser lo mejor, porque los glicoalcaloides son, después de todo, tóxicos y pueden producir efectos secundarios desagradables, aunque no necesariamente graves.